martes, 18 de septiembre de 2012

EN RUTA CON COMODORO (Día 1)



Comodoro Rivadavia, motero hasta la médula, socio de la AMM y un gran viajero, nos brinda las experiencias, aventuras y desventuras del apasionante viaje por Europa que realizó en junio (2012). Sigamosle...

Miércoles 27 de junio - Vengo haciendo ruta desde Valence, próximo a Lyon en Francia y de camino hacia Suiza, mi primer objetivo. El tiempo no viene acompañando que digamos, lluvia persistente desde que he salido. En algún momento el Sol me ha acompañado, pero solamente para hacerme el viaje un poco más agradable.

Mi escaso conocimiento de idiomas me tenía un poco preocupado, pero lo cierto es que con un poco de mano izquierda te puedes apañar perfectamente. Como en ruta, ligero, nada de primero, segundo y postre; bocata o tentempié y se acabó.La sangre la quiero en la cabeza no en elestómago,esforzándose por digerir
los pedazos de carne y pesados guisos que tanto abundan por estas zonas.


Los kilómetros van cayendo y la jodida lluvia también. La chaqueta Vanucci (alemana aunque suene a italiana) aguanta como una campeona, Los pantalones ya sabía que aguantaban pues lo han hecho en otras ocasiones.....pero las botas IXS, ¡manda carajo, sólo aguantaron dos horas! Desde luego quise probar el equipo bajo unas condiciones un poco duras, pero las botas se suponía que eran de calidad y no es así. Menos mal que siempre llevo el equipo de agua al completo, pare en una gasolinera y me equipe de arriba a abajo, fundas para las botas y los guantes incluidos.

Bueno ya calentito proseguí la ruta hasta Interlaken en Suiza, paro en la frontera ,aunque no me dicen nada, pregunto por la "vignette" y me atiende una policía que podía estar en la portada de Interviu, y no es broma guapísima de principio a fin.... pensé en España, por la guapa y sobretodo, ahora que esta el tema candente, en la estafa a la que nos someten las concesionarias de autopistas.No es broma, la vignette cuesta 32 euros y da derecho a usar las autopistas....todo el año y les sale a cuenta, desde luego es para pensarlo.

El paisaje comienza a cambiar, puedo verlo a través del casco y las gotas de agua, aunque el francés es muy bonito en la zona alpina, esto es distinto. Paso sin para por Ginebra y Laussane, la lluvia esta atizando de lo lindo y se me empieza a hacer pesado, quiero llegar y darme una ducha caliente.

El GPS me saca de la autopista y me indica que voy a joderme en una carretera de curvas empapada, de tres metros de ancho durante unos kilómetros; por cierto, una caída no es opcional, los guardarraíles dan miedo.La velocidad en ningún momento supera los 80 Km.

Por fin, coño, por fín llego a Interlaken, bajo una tormenta de mil pares de "webs"; ya quisieramos que lloviese así en el sur de España. Bien, localizo el hotel que había reservado con el Booking, y resulto ser un lugar para jóvenes montañeros...lamento no haber hecho foto de la cara que puso el chaval al verme entrar chorreando agua y también lamento no haber sacado la mía cuándo me pidio el "passport" y no lo encontre hasta pasado un rato, por que el comentario que me hizo: ho,ho! , me dejo preocupado.



Bien, pues una vez solventado el problema del dichoso "passport" subo a la habitación, está situada en una casona de madera típica de estos lares, por lo que la imagino, cálida, vieja y destartalada y menuda sorpresa, moqueta gris en el suelo, cama roja con nórdicos de pluma verdes, paredes decoradas por un grafitero que domina el spray como pocos ; desde luego un auténtico choque cultural.

Una curiosa casa que podía ver desde la ventana

Después del choque y la ducha me pongo ropa de civil, cojo mi paraguas de un palmo y me lanzo a las calles de Interlaken... Algo no cuadra, esta lleno de japoneses, hindúes, paquistaníes y otras gentes que no me esperaba...hoy es el día de los choques culturales, así que raro en mí, me meto en un Burguer King, tengo "haungry" y una buena hamburguesa con papas fritas me la quitara. Me pido una big mac, me la meriendo y me tengo que pedir otra, pués es poco más grande que una pelota de petanca....no se porque la llaman "big", menuda mierdecilla y por cierto: en Suiza es caro hasta el respirar, así que si vais a hacer ruta preparadlo todo de antemano.

Voy paseando, no tengo prisa, me encuentro relajado después de los kilómetros bajo la lluvia. Unos músicos de jazz tocan en la terraza de un bar, tienen oficio, suenan bien. Me paro a escucharlos y pienso ¡coño, estoy en otro país, esta lloviendo, no entiendo nada de lo que dicen y el jazz suena de puta madre, me he quitado el hambre y el frío...¡esto empieza a funcionar! Los alrededores de Interlaken se que son muy bonitos y también se que aqui las nubes estan muy bajas, con lo que no se puede ver nada y además es el clima habitual, por lo tanto doy fé de que todo esta muy verde, hasta el agua de los ríos tienen ese color turquesa especial.

El hotel Central, junto al rio Aare y su verde turquesa
A las nueve de la noche retorno al hotel, última cervecita, el ambiente está animado, me pongo a hablar con un grupo de gente del país que están pateando montañas, al final nos vamos entendiendo medio en inglés, medio en francés...pero de español no tienen ni papa, no me preocupa, es curioso. Nos dan las once y toca retirada, a pesar de la juventud que hay se respetan los horarios de silencio y logro dormir de tirón hasta las seis de la mañana, luego sigo perreando hasta las siete y media, la cama es cómoda y el nórdico calentito.
Toca desayuno, café, tostadas, un poco de jamón cocido y queso y me pongo las pilas, me sale la noche con desayuno por cincuenta euros al cambio, para ser Suiza es muy barato.

Al salir el tiempo esta muy nublado, pero la lluvia no cae, mi próximo destino es Gruen, una aldea al lado de Zell, en Alemania. Voy a ver el partido de la Eurocopa entre Alemania y Portugal en un pueblo campesino, donde sino.


Comodoro Rivadavia

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